10
1 Mis hermanos y hermanas, el deseo de mi corazón—mi oración a Dios—es la salvación del pueblo de Israel. 2 Puedo dar testimonio de su ferviente dedicación a Dios, pero esta dedicación no está basada en conocerlo como él realmente es. 3 Ellos no comprenden cómo Dios nos hace justos, y tratan de justificarse a sí mismos. Se niegan a aceptar la manera en que Dios justifica a las personas. 4 Porque Cristo es el cumplimiento de la ley. Todos los que confían en él son justificados. 5 Moisés escribió: “Todo el que hace lo recto mediante la obediencia de la ley, vivirá”.* Citando Levítico 18:5. 6 Pero la disposición de hacer lo recto que proviene de la fe, dice esto: “No preguntes ‘¿quién subirá al cielo?’ (Pidiendo que Cristo descienda a nosotros), 7 o ‘¿quién irá al lugar de los muertos?’† Literalmente, “el abismo”, pozo sin fondo. (Pidiendo que Cristo regrese de entre los muertos)”.‡ Ver Deuteronomio 30:12. 8 Lo que la Escritura realmente dice es: “Este mensaje está muy cerca de ti, es lo que hablas y lo que está en tu mente”.§ Estas son alusiones a Deuteronomio 30:11-14. Originalmente se aplicaban a la ley, y servían para indicar que la ley no era distante e inalcanzable, negando claramente que fuera difícil su observancia. Ahora Pablo lo aplica a la persona de Cristo, aclarando que este “mensaje de la ley” se cumplió en él. De hecho, lo que estamos mostrando es este mensaje, basado en la fe. 9 Porque si declaras que aceptas a Jesús como Señor, y estás convencido en tu mente de que Dios lo levantó de los muertos, entonces serás salvo. 10 Tu fe en Dios te hace justo, y tu declaración de aceptación a Dios te salva. 11 Como dice la Escritura: “Los que creen en él no serán frustrados”.* Citando Isaías 28:16. Frustrados: o “avergonzados”.
12 No hay diferencia entre judío y griego, porque el mismo Señor es Señor de todos, y da generosamente a todos los que le piden. 13 Porque “todo el que invoque el nombre del Señor será salvo”.† Citando Joel 2:32. 14 Pero ¿cómo podrá la gente invocar a alguien en quien no creen? ¿Cómo podrían creer en alguien de quien no han escuchado hablar? ¿Y cómo podrían escuchar si no se les habla? 15 ¿Cómo podrán ir a hablarles si no se les envía? Tal como dice la Escritura: “Bienvenidos son los que traen la buena noticia!”‡ Citando Isaías 52:7. 16 Pero no todos han aceptado la buena noticia. Como pregunta Isaías: “Señor, ¿quién creyó en la noticia de la que nos oyeron hablar?”§ Citando Isaías 53:1. 17 Creer en Dios viene de oír, de oír el mensaje de Cristo.
18 Y no es que no hayan oído. Muy por el contrario: “Las voces de los que hablan de Dios* Implícito. se han oído por toda la tierra. Su mensaje se extendió por todo el mundo”.† Citando Salmos 19:4. 19 Así que mi pregunta es: “¿No sabía Israel?” Primero que nada, Moisés dice: “Les haré sentir celos usando un pueblo que ni siquiera es una nación; los haré enojarse usando extranjeros ignorantes”.‡ Citando Deuteronomio 32:21. 20 Luego Isaías lo dijo con mayor vehemencia: “Fui encontrado por personas que ni siquiera me estaban buscando; me presenté a personas que ni siquiera estaban preguntando por mí”.§ Citando Isaías 65:1. 21 Como dice Dios a Israel: “Todo el día extendí mis manos a un pueblo desobediente y terco”.* Citando Isaías 65:2.
*10.5 Citando Levítico 18:5.
†10.7 Literalmente, “el abismo”, pozo sin fondo.
‡10.7 Ver Deuteronomio 30:12.
§10.8 Estas son alusiones a Deuteronomio 30:11-14. Originalmente se aplicaban a la ley, y servían para indicar que la ley no era distante e inalcanzable, negando claramente que fuera difícil su observancia. Ahora Pablo lo aplica a la persona de Cristo, aclarando que este “mensaje de la ley” se cumplió en él.
*10.11 Citando Isaías 28:16. Frustrados: o “avergonzados”.
‡10.15 Citando Isaías 52:7.
§10.16 Citando Isaías 53:1.
*10.18 Implícito.
†10.18 Citando Salmos 19:4.
‡10.19 Citando Deuteronomio 32:21.
§10.20 Citando Isaías 65:1.
*10.21 Citando Isaías 65:2.